Aficionados de Inglaterra devastados pero llenos de esperanza tras la derrota en la final de la Copa del Mundo

“Ellas nos han inspirado”, dijo Kaitlin Howard, una profesora de 26 años que juega para el Woking Football Club. Para las generaciones más antiguas, el progreso desde el primer partido internacional de mujeres de Inglaterra en 1972 fue claro.

Los fans del fútbol inglés regresaron a casa con una amarga decepción el domingo, tras perder la final de la Copa Mundial Femenina por 1-0 ante España, pero en la derrota muchos de ellos encontraron inspiración y esperanza para las generaciones futuras en el deporte.

Grandes multitudes acamparon con comida para picar y mantas para picnic para animar a Inglaterra en las proyecciones públicas a lo largo del país, mientras que los apostadores pintados en la cara comenzaron el día con una cerveza en bares y pubs llenos. Pero la "fiesta de visualización" a nivel nacional que comenzó al desayuno se había disuelto en el desánimo para el almuerzo, ya que las Lioness no pudieron revertir el gol de España en la primera mitad antes de que el silbato final sonara a más de 10.000 millas de distancia en Sydney.

Ellos pueden no haber ganado, y es tan triste, pero han hecho mucho por el fútbol femenino, y eso es lo que importa, dijo Jennifer Maidment, una estudiante de 25 años que vio el partido en Londres. Más temprano esta semana, el gobierno había alentado a los bares a abrir temprano, los supermercados pronosticaron un aumento en la demanda de alimentos para desayunar y para barbacoa, y la Iglesia de Inglaterra dio su bendición a aquellos que querían ajustar el partido a su culto dominical.

La escala de la emoción nacional reflejó el creciente perfil público del fútbol femenino en Inglaterra, donde el avance del equipo hasta la final se basó en su victoria en el Campeonato Europeo del año pasado. "Nunca tuvimos modelos a seguir cuando éramos más jóvenes, así que tener modelos ahora es increíble. Nos han inspirado", dijo Kaitlin Howard, una profesora de 26 años que juega para el Woking Football Club.

Para las generaciones más antiguas, el progreso desde el primer partido internacional de mujeres de Inglaterra en 1972 era claro. "Jugamos frente a unas 400 personas... ahora es muy, muy diferente", dijo la antigua jugadora de Inglaterra Pat Davies, de 68 años, mientras reflexionaba sobre el nivel de apoyo en un recinto con entradas agotadas en Londres.

Es simplemente fantástico, no pensábamos que veríamos esto en nuestra vida.

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